Reflexiones sobre el Liderazgo Pastoral por Marcos Witt

Pastor y Ministro de Alabanza – Marcos Witt

Salmo 23

“Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; Me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tú vara y tu cayado me infundirán aliento. Aderezas mesa delante de mí en presencia de mis angustiadores; Unges mi cabeza con aceite; mi copa está rebosando. Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida, Y en la casa de Jehová moraré por largos días.”

Introducción al Salmo 23

El Salmo 23 es uno de los capítulos más significativos sobre el liderazgo en el Antiguo Testamento. Aunque a menudo lo leemos con un enfoque devocional, hoy se nos invita a verlo desde una perspectiva pastoral y de liderazgo. En este salmo, encontramos ocho ingredientes esenciales para ser un buen pastor.

Ingredientes para ser un Buen Pastor

1. Proveer alimento a las ovejas

• Es nuestra responsabilidad proveer alimento a nuestras ovejas.
• Nuestras ovejas deben venir con la seguridad de que encontrarán nutrición espiritual y saldrán transformadas.
• Es vital estar bien preparados para predicar. ¡No podemos improvisar!
• Debemos asegurarnos de que nuestras ovejas deseen regresar, no que estén deseando irse.

Preparando un Mensaje Efectivo

Cuando preparo un mensaje, busco tres aspectos:

1. Practicidad: Debe ser algo que la gente pueda aplicar en su vida diaria.
2. Relevancia: Es crucial abordar las necesidades actuales y preguntas de la congregación.
3. Diversión: El humor puede abrir corazones y conectar con la audiencia.

2. Darle descanso a las ovejas

• Las ovejas están cansadas y necesitan tiempo para recuperarse.
• Como líderes, debemos proporcionar continuidad y un ambiente de descanso espiritual.

3. Dios nos llama a confortar

• En los próximos años, los líderes que ofrezcan esperanza y consuelo serán los que impactarán su ciudad para Cristo.
• La nueva generación busca desesperadamente estas virtudes.

4. Guiar al pueblo

• Nuestra tarea es guiar al pueblo, mostrándoles un futuro prometedor.
• Debemos inspirar a las ovejas a seguirnos voluntariamente, no a empujarlas.

5. Proteger

• Imaginen un día en que la congregación diga: “No tengo temor porque usted me lleva con confianza”.
• Como pastores, debemos proteger a nuestras ovejas de las amenazas que las rodean, los verdaderos peligros espirituales.

6. Corregir

• La corrección debe ser impartida con aliento y no con temor.
• Debemos cultivar una relación donde nuestras ovejas se sientan cómodas al acercarse a nosotros.

7. Servir a las ovejas

• Servir es la clave del liderazgo en el ministerio.
• Jesús nos dejó el ejemplo de ser un líder siervo.
• Debemos estar en el ministerio con un corazón genuino para servir y ver vidas transformadas.

8. Ungir a nuestras ovejas

• Somos responsables de transmitir la unción a las siguientes generaciones.
• Un verdadero líder debería estar levantando a otros líderes a su alrededor.

Conclusión

Ser pastor es una tarea noble y desafiante. Cada ingrediente mencionado es fundamental para nutrir y guiar a nuestras ovejas en el camino de la fe. La misión de un buen pastor no es solo guiar, sino también servir y transformar vidas a través del amor y la dedicación.

Pastor y Ministro de Alabanza – Marcos Witt