Reflexiones sobre el Agua de Vida

Por: Ruben Garza – Texas, EUA

Después de un viaje de una semana, mi esposa y yo estábamos desayunando y mirábamos nuestro balcón y nuestro césped.

El estado de nuestras plantas

Notamos que nuestras plantas estaban tristes y algunas estaban muriendo por falta de agua.

• Inmediatamente, regué todas las plantas
• Comencé a regar el césped

Pensé: Quizás puedo salvar alguna de las plantas.

La transformación

Al poco tiempo, noté que algunas de las plantas habían revivido. Lucían llenas de vida, como si hubieran sido regadas todo el tiempo. ¡Qué cambio!

Una reflexión personal

Esta experiencia me recordó que los seres humanos nos podemos sentir atropellados, solos, sin esperanza, a veces confiando solo en nuestros propios recursos para resolver nuestros problemas.

Al igual que esas plantas tristes, no podemos continuar sin alimento espiritual. Necesitamos el agua de vida que solo Jesucristo puede ofrecer.

Así como a la mujer samaritana se le dio la oportunidad de recibir el agua de vida eterna, nosotros también podemos recibir esta agua de vida a través de la fe en Jesucristo.

Una oración

Oh Dios, tú eres la vida que nos sostiene. Danos fe para beber profundamente del agua de vida que ofreces. Amén.

Versículos para reflexionar

• Apocalipsis 21:6: «Y díjome: Hecho es. Yo soy Alpha y Omega, el principio y el fin. Al que tuviere sed, yo le daré de la fuente del agua de vida gratuitamente.»

• Apocalipsis 22:1: «Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero.»

Por: Ruben Garza – Texas, EUA