El Dios Que Me Ve – Rodolfo Mendoza

Reflexiones sobre la Congoja y las Promesas de Dios

Pastor: Rodolfo Mendoza – www.CashLuna.org

La Percepción de Dios

Dios mira y conoce cada íntimo pensamiento. Él comprende lo que decimos en nuestro corazón. Sabemos que la congoja nos ensordece y nos priva de escuchar y creer sus promesas. Por eso, confronta nuestros sentimientos para que podamos creer en Él.

La Congoja Ensordece

Recientemente, compartí un mensaje titulado “La bendición de la soltería”, donde hablaba de la congoja que sienten los solteros al no encontrar pareja. En lugar de entristecerse, deberían aprovechar la oportunidad para agradar al Señor y servirle. Esto se fundamenta en la Escritura de 1ra de Corintios 7:32-34, donde el Espíritu me hizo entender que la congoja bloquea nuestros sentidos espirituales, limitando nuestra búsqueda de Dios.

Reflexiones sobre los Solteros

  • Los solteros afligidos por su estado civil pueden perder la oportunidad de dedicar tiempo a:
    1. Orar
    2. Leer su Palabra
    3. Servir en su obra

La congoja nos priva de alcanzar las promesas de Dios en cualquier área de nuestra vida.

Ejemplos de la Escritura

Por ejemplo:

  • El pueblo de Israel no escuchó lo que Moisés les decía porque sus corazones estaban acongojados.
  • Abraham se rió cuando Dios le habló sobre tener un hijo, no porque no escuchara, sino porque estaba más consciente de sus problemas que de las promesas de Dios.

Lección importante: Dios puede darte una promesa que te bendecirá y prosperará, pero el cansancio de las adversidades puede impedirte escucharla. Preocuparte por los problemas puede hacerte perder la ayuda divina en tu vida y en tu matrimonio.

La Influencia de la Tristeza

Cuando la tristeza inunda tu corazón, esto no te permitirá escuchar a Dios. En lugar de confrontar tus sentimientos con su Palabra, buscarás justificar tu tristeza. El resultado es que no podrás creer en Dios.

  • Consecuencia: La tristeza te aleja de disfrutar la vida como Dios lo planeó para ti.

La Lucha en las Iglesias

Existen muchas personas en las iglesias que, aunque están presentes, mentalmente divagan en sus problemas, ofensas y suposiciones, en lugar de concentrarse en la Palabra que los puede liberar. Ironía: la congoja que los aprisiona les impide escuchar lo que podría traerles libertad.

La Voz Interna

Todos tenemos una voz interna. Aunque no lo creas, tú mismo eres quien más se habla a sí mismo. Dentro de ti, escuchas tres voces: la de Dios, la del diablo y la tuya. La voz más fuerte suele ser la tuya.

Dos Tipos de Voces Internas

  1. Voces Motivadoras: Aquellos que se hablan de manera positiva, cultivando su fe, triunfan y son seguros de sí mismos.
  2. Voces Críticas: Aquellos que se autoflagelan con comentarios negativos, construyendo una imagen pobre de sí mismos y eventualmente alejándose de los demás.

Un Ejemplo de la Escritura

En Génesis 17, encontramos un ejemplo poderoso. Cuando el Señor le habló a Abraham sobre las promesas que le había dado, Abraham se rió de incredulidad. Era un gesto de desesperanza que lo mantuvo alejado de la promesa que tanto había anhelado.

«El Señor le reprendió por su incredulidad y le aseguró que nacería Isaac».

Creer en las Promesas de Dios

  • ¿Por qué no podemos creer a la primera?
  • ¿Por qué es difícil aceptar que Dios realmente nos ama y desea bendecirnos?

Cuando Dios te haga una promesa, responde con fe: «Te creo».

Promesas de Dios

Cuando Dios te dice:

  • «Te amo» – Responde: «Te creo».
  • «Te bendeciré grandemente» – Di: «Te creo».
  • «Ningún enemigo te hará frente» – Afirma: «Te creo».
  • «Todo pecado ha sido perdonado» – Cree: «Te creo».

Reflexión Final

Dios es el Dios que te ve y conoce los pensamientos de tu corazón. Evalúa esos pensamientos y alinéalo con su Palabra. Así, vivirás la vida plena y abundante que Él siempre ha deseado para ti.

Pastor: Rodolfo Mendoza – www.CashLuna.org


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